Jueves 22 de marzo 18hs, explanada de la Udelar ¡A movilizarse contra la Ley de Riego!

En 2004 el 64,5% resolvió en un plebiscito que el agua potable y saneamiento esté en manos del Estado 

Necesitamos una gran lucha para hacerlo respetar

Desde hace meses, académicos de la Facultad de Ciencias, organizaciones como Redes-Amigos de la Tierra y la Comisión en Defensa del Agua, vienen denunciando que la ley ahora aprobada con los votos del FA, Colorados, Blancos, Novick y el P. Independiente, es una violación al artículo 47 de la Constitución, ya que dicha ley habilita la mercantilización del agua.

El proyecto permite que inversores privados “de otro giro” (distinto al sector agrícola), se incorporen a las Sociedades Agrarias de Riego (SAR), y que estas empresas puedan acogerse a los beneficios fiscales establecidos en la Ley de Promoción de Inversiones. Es decir, han convertido el agua en otro gran negocio. Y como todo buen negocio, siempre va a parar a manos de la patronal privada, en este caso, al servicio del agronegocio.

En ese sentido, el año pasado, una nota firmada por los investigadores de la Facultad de Ciencias, Claudia Piccini, Guillermo Chalar y Luis Aubriot, y por la ingeniera agrónoma, Anahit Aharonian, se sostenía que la hoy aprobada ley “avanza hacia la creación de un mercado del agua que se instrumentará a través de agentes privados (…). Esto es absolutamente contrario a lo que establece el artículo 47 de nuestra Constitución, que fuera reformado en el año 2004 a través del voto con un 64% de aprobación popular”, advierten los firmantes.

¿Cómo derrotar esta privatización del agua?

Antes que nada, saludamos todas las iniciativas de los activistas y las denuncias que lograron poner este tema tan importante en el debate público, incluso logrando que la Mesa del PIT-CNT se pronunciara al respecto. Al mismo tiempo, queremos hacer un debate honesto y fraternal con los compañeros que está colocando toda su valiosa energía en la juntada de firmas, para convocar un plebiscito con el objetivo de que allí se derogue la Ley de Riego.

Nosotros desde IST, opinamos que este gobierno y los anteriores, se vienen burlando de todos los pronunciamientos populares, y en este caso específico, no respetan el 64% que ya votó en un plebiscito en el año 2004 para que el agua sea administrada únicamente por el Estado. Y tampoco respetan el 79% que votó contra las privatizaciones durante el gobierno Blanco de Luis Alberto Lacalle.

Sostenemos además, que el mecanismo del plebiscito (que en algunos momentos puede ser útil), se ha utilizado en nuestro país de manera muy frecuente, como un pantano al cual nos encaminan como forma de desviar las luchas hacia los marcos democrático-burgueses, con el objetivo de desmovilizarnos, de sacar el foco de las calles para colocarlo en las urnas, que es un terreno predilecto para la burguesía.

Creemos que las organizaciones que se reclaman de la izquierda o populares, aunque lo hayan hecho con la mayor honestidad, con esta política han caído presas de subordinar la lucha de clases, a los marcos de la democracia patronal. Debemos recordar que la derrota en el plebiscito por el tema Derechos Humanos en 2009, significó un gran golpe y una desmoralización para la vanguardia luchadora. Debemos aprender de las experiencias, de los errores, y valorar cuando sirve a nuestros intereses utilizar algunos mecanismos incluidos en la constitución de los capitalistas.

Para nosotros, el plebiscito no debe ser el eje ni la tarea central donde debamos colocar todas nuestras fuerzas. Más aún, cuando ya existen plebiscitos que votaron en contra de lo que el gobierno quiere aplicar hoy.

Debemos exigir en todo caso, que se respeten los resultados tanto del plebiscito de 2004 como el del 1992. Para ello, nosotros opinamos que es necesario colocar toda esa energía en organizar una gran batalla, que por medio de grandes movilizaciones que tengan continuidad, le pegue con fuerza al gobierno para derrotar esta y todas las privatizaciones que se llevan adelante.

Desde IST llamamos a los honestos luchadores que hoy se ponen a disposición de esta campaña contra la Ley de Riego, a organizarse, debatir, a exigirle a la central obrera, que ponga fecha a un gran paro general en contra de todas las privatizaciones y ponga a disposición todos los medios necesarios para llevar adelante una gran pelea hasta derrotar el proyecto privatizador y extranjerizador del gobierno del FA, que es apoyado y aplaudido por toda la derecha.