Valeria Ripoll, dirigente de Adeom, quien acaba de conquistar cinco cargos en la pasada elección del gremio municipal, formuló varias declaraciones que generaron polémica pública en la cúpula de la Central.

Ripoll dijo a varios medios de prensa que fue “vetada por la corriente mayoritaria del PIT-CNT» para ser oradora en el acto del 1º de mayo y que les propusieron «viajecitos a Cuba y otros destinos» a cambio de que se retirara la propuesta de que ella hablara.

Refiriéndose al acto que realiza la Central afirmó que “va a ser político partidario. No va a ser un acto donde se discuta la problemática de la clase trabajadora (…)». En su cuenta de Facebook continuó diciendo sobre el sector mayoritario del PIT-CNT: “ustedes no son de izquierda, son fanáticos del acomodo y meten el verso de la izquierda y la derecha y blablabla… Nunca podrían vivir en el socialismo porque son burgueses. (…) destilan hipocresía en su burbuja de comodidad gracias a los acomodos que tienen, «militantes» rentados que cobran por todo lo que hacen, porque gratis no han hecho nada de nada (…)

Esta discusión que hoy toma estado público la venimos planteando por años desde nuestra corriente política IST y nuestros compañeros en todos los gremios donde participamos. Si bien coincidimos en gran parte de lo denunciado, queremos expresar algunas diferencias con lo expuesto y tratar de ver el fondo de este gran problema que tenemos los trabajadores con la dirección del PIT CNT.    

La burocracia sindical: una casta privilegiada

Nosotros afirmamos que la gran mayoría de los dirigentes de la Central son una casta privilegiada que viven desde hace años sin trabajar, han eliminado la democracia obrera y las asambleas masivas y resuelven todo en las alturas, sin consultar a los trabajadores.

No son burgueses como afirma Ripoll, ya que no son propietarios de los medios de producción: ellos son una burocracia enquistada en nuestra herramienta que debería ser para la organización y la lucha. Estos burócratas no trabajan desde hace muchos años, se alejaron de la base y solo quieren negociar con las patronales y el gobierno para asegurar sus cargos y sus sillones.

Otra de las características importantes que utilizamos los marxistas para definirlos como burócratas son sus privilegios materiales. Hacen uso a su antojo de los dineros sindicales y un ejemplo claro son los “viajecitos a Cuba”.  Pero no son solo viajes sino que usan sin consultar los dineros de los sindicatos con los llamados viáticos, con los cuales varios dirigentes llegan a tener un segundo sueldo.

No hay casi dineros para el fondo de huelga y sostener una lucha larga, pero se toman la atribución de realizar obras que nos anuncian por la televisión, como el Hotel en Colonia donde se gastan decenas de miles de dólares. Con los fueros sindicales pasa algo parecido ya que no están al servicio de la lucha sino de sus planes burocráticos y para conseguir seguidores.  

Estos privilegios, estas bases materiales, es lo que los define como burócratas. No es una ideología o una forma de pensar, son privilegios que defienden con uñas y dientes. Y además, la mayoría de la dirección de la Central está atada al gobierno del FA y lo defiende. No quiere luchar contra él, perdiendo de esta manera totalmente la independencia de clase. Por ello los trabajadores necesitamos cambiar a estos dirigentes. Es necesario echar a estos burócratas acomodados y privilegiados poniendo en su lugar a compañeros honestos, que quieran luchar, que no tengan privilegios y que resuelvan todo en asambleas y consultando a la base.  


El congreso del PIT-CNT y las corrientes minoritarias

Si bien hubo tres documentos diferentes en el pasado congreso, a la hora de votar la dirección del PIT CNT hubo lista única votada por todos los presente con apenas 4 abstenciones y ningún voto en contra.

¿Cómo se puede explicar esto?

Es que en el Congreso existió un acuerdo que no fue consultado ni discutido con la enorme mayoría de los trabajadores. Se acordó y se votó una “Mesa Representativa” de 43 integrantes y que Fernando Pereira y Marcelo Abdala siguieran estando al frente de la Central. Esto para nada justifica el cercenamiento de la palabra a representantes de la minoría. Pero muestra a las claras que el problema de la democracia obrera y la consulta a los trabajadores estuvo ausente en esas decisiones. Lo otro es el problema de la burocracia y los privilegios, que si bien en la mayoría sindical es aberrante y descarado, existe en muchos de los sindicatos que hoy son minoría y debemos resolverlo los trabajadores tomando las medidas necesarias para poder construir una nueva dirección combativa.

Este 1 de mayo te invitamos a venir a la reunión de IST  en la zona de La Teja, desde la hora 12,30. Comunícate con nosotros por whatsapp 092 788 128 y así coordinamos tu llegada.


Un programa contra la burocracia sindical

Por la democracia obrera. Que se decida en grandes asambleas de base

Que los dirigentes ganen igual que lo que ganaban en su puesto de trabajo

Control estricto de los dineros sindicales: basta de viáticos permanentes y viajes.

Que las asambleas discutan y decidan el uso de los dineros y los fueros sindicales

Por un gran fondo de huelga para usar cuando estemos en conflictos y así evitar que quiebren la lucha

Rotación de los dirigentes que dejan de trabajar: luego de dos años en los cargos deben volver a la base y a su lugar de trabajo

Por un plan de lucha unificado, de todos los gremios pùblicos y privados, decidido en la base y que tenga continuidad para pelear contra el gobierno y las patronales

Por una nueva dirección sindical que quiera luchar en serio. Recuperemos los sindicatos para los trabajadores. Expulsemos a la burocracia de nuestras organizaciones