Los y las trabajadoras/es del Ministerio de Educación y Cultura se han declarado en conflicto. Una vez que entendieron han agotado, hasta el momento las instancias de diálogo que insistentemente vienen pidiendo de carácter urgente a la Dirección de Educación de dicho ministerio y a la propia ministra María Julia Muñoz.

Si bien, ante alguna de las solicitudes los y las trabajadoras/es han sido recibidos por alguna autoridad de la Dirección de Educación de dicho ministerio, para plantear sus inquietudes, las respuestas que han recibido no han sido en función de resolver ninguna de las problemáticas que han planteado. Se ve necesario exigir respuestas, ante una situación laboral sumamente precaria, que se entiende afecta a su vez, directamente en la calidad educativa de los y las jóvenes que acuden a las instituciones de dicho ministerio en busca de una propuesta educativa que les promueva su derecho a la educación, el cual la educación formal no ha podido brindarles.

La movilización es parte de las medidas que buscan llevar adelante, con la finalidad de manifestarle tanto a las autoridades, como a la opinión pública la gran preocupación que sienten, ante la situación que tanto trabajadores/as, y los propios estudiantes padecen a diario en las instituciones educativas del MEC.

Puntualmente en lo que tiene que ver con la propuesta educativa no formal del Ministerio, llevada a cabo en los CECAP (Centro de Capacitación y Producción), se vienen llevando a cabo por parte del MEC políticas de recortes en cuanto a recursos humanos, cierre de talleres y proyectos productivos brindados a los y las jóvenes, falta de recursos de seguridad en relación a la dimensión edilicia y las distintas problemáticas de violencia social en las que estamos insertos a diario, problemas de infraestructura edilicia que dificultan la tarea educativa y pone en riesgo la integridad de trabajadores/as y estudiantes.

Otros puntos que afectan ya no solo a los trabajadores/as del sector de Educación,sino también al resto de trabajadores/as de los distintos sectores del Ministerio de Educación y Cultura son, la precarización laboral a través de formas contractuales ilegales, y el continuo acoso y persecución laboral permitido en parte por este modo contractual.

A través del modo precario por el cual son contratados, amparado por el decreto 171/013 que regula el marco de dichas contrataciones de horas docentes, se entiende se vulneran derechos básicos de los y las trabajadores/as.

Estos derechos tienen que ver con la presupuestación, que brinde la posibilidad de una estabilidad laboral y permanencia en el cargo, derecho a días de licencia por antiguedad, el derecho a prestaciones sociales tales como el FONASA, ya que las y los docentes de CECAP son contratados en régimen de diez meses, y al finalizar la contratación pierden el derecho a la asistencia de salud y seguro de desempleo, el derecho a la jubilación anticipada por docencia directa, al estar dados de alta en BPS como trabajadores/as “zafrales”.

Carecen también de aumento salarial correspondiente al reconocimiento de la antiguedad, no se les paga valor diferenciado de la hora docente según características del contexto en el que se trabaja, y no perciben ingresos por asiduidad,entre tantos otros derechos vulnerados.

3 Con respecto a la actitud tanto de la ministra como de las distintas autoridades correspondientes a la Dirección de Educación de dicho ministerio, los trabajadores parecen muy preocupados. Preocupados por la falta de respuestas que den solución a las problemáticas anteriormente mencionadas, lo que se entiende demuestra la falta de interés a la hora de resolver las problemáticas que los y las trabajadoras han planteado como de carácter urgente.

Esto se entiende, afecta la calidad laboral, como la calidad del proceso educativo de los y las jóvenes que provienen mayoritariamente de contextos sumamente vulnerables, y que concurren a las instituciones educativas de este ministerio, en búsqueda de nuevas oportunidades brindadas por parte del estado, el cual en la práctica, termina no cumpliendo con lo prometido “la educación será la prioridad”.

Es un compromiso de todas y todos, buscar revertir estas situaciones, que son producto de las malas políticas públicas que en lo que tiene que ver con educación, este gobierno viene fallando enormemente.

Es necesario continuar exigiendo la importancia de mayor presupuesto para la educación, ya que entre otras cosas, es la herramienta fundamental que promueve para las nuevas generaciones, nuevas oportunidades, con mayores posibilidades de desarrollo profesional y humano, con la finalidad de construir una sociedad más igualitaria.

Es necesario continuar exigiendo respuestas y acciones favorables y concretas a estas problemáticas para un mayor acceso a una educación de calidad, tanto para nuestros jóvenes como para todos aquellos/as trabajadores/as de la educación que diariamente apostamos a que ello se cumpla.