Todo lo que está sucediendo en torno a las ambiciones electorales de los representantes de la narcopolítica como Cartes, el genuflexo Llano y el cínico y oportunista de Lugo, y de esa manera se abre una peligrosa senda regresiva en cuanto al régimen político.
Una masa enardecida expresa su descontento. Miles de personas, principalmente jóvenes, ante tamaño atropello, ganaron las plazas del Congreso expresando no sólo su rechazo ante la arremetida reaccionaria, sino también la rabia contenida contra todo el régimen y, principalmente, contra el gobierno de Cartes.
Esta furia e ira contenida de amplios sectores avasallados por el rampante autoritarismo del gobierno y la desvergonzada corrupción del Parlamento se expresó en la quema de partes enteras del edificio del Congreso.
Más retroceso en el régimen es intolerable. La arremetida enceguecida contra normas y procedimientos básicos de la institucionalidad burguesa, expresa la onda avasalladora del gobierno de Cartes en artera conspiración con Lugo y Llano que buscan sacar sus ventajas de claque y de rosca.
Los actos como los vividos advierten que éste escenario es apenas la ante sala de un mayor endurecimiento del régimen. Ante la inminencia de la apertura de una etapa con mayores ribetes reaccionarios, entendemos que el recurso que queda es la clara y contundente manifestación del rechazo como de la realizada en la tarde y noche de furia del 31 de marzo.
El Luguismo como peón de la estrategia cartista
Las encuestas obnubilan a quienes tienen meros intereses electoralistas. El luguismo se juega a asegurar los puestos de sus legisladores y justifica su movida con el discurso ingenuo de que lo derrotarán electoralmente. Lugo, se llama al silencio dejando el trabajo sucio a sus senadores quienes acompañan fanáticamente un proceso que nos lleva hacia un pasado al cual no queremos regresar.
La oposición que queda por fuera de la mesa de Cartes y sus barones. Sin dar ningún apoyo a la actual oposición política, que son otros ilustres sinvergüenzas, representantes de intereses del otro bando capitalista (Marito, Alegre y compañía), condenamos los sucesivos atropellos que acomodan la Constitución Nacional para continuar con el saqueo y la miseria de la mayoría del pueblo trabajador.
Ambos bandos capitalistas nada tienen que ver con nuestras vidas y nuestros intereses. Llamamos al pueblo trabajador a que rompa con los partidos tradicionales y con los que propugnan ser el cambio mientras negocian y conviven con lo peor de la política paraguaya. Esta disputa inter-burguesa nos interesa en la medida en que no se vuelva hacia un régimen autoritario como el vivido con el estronismo.
Convocamos al pueblo trabajador a organizarnos y movilizarnos para frenar este proceso autoritario.
Comité Ejecutivo Nacional del PT, 31-03-2017
Lea también: