El conflicto educativo contra la reforma mercantilista del gobierno de Lacalle Pou se sigue extendiendo. Lo que comenzó con los estudiantes de formación docente ocupando los Centros de Formación regionales, el IPA y Magisterio contra el cambio en la malla curricular, fue seguido por los estudiantes de secundaria que ocuparon liceos como los históricos Zorrilla, Bauzá, Miranda, IAVA, Dámaso, sumando tras ellos a los profesores.
En las últimas semanas la Universidad se unió a la pelea. Comenzaron a ocuparse facultades de manera rotativa: Humanidades, Ciencias Sociales, Psicología, Arquitectura, entre otras. Al cierre de esta edición, docentes y funcionarios de la UDELAR y también los profesores de secundaria, convocaron a una huelga de como mínimo tres días, con asambleas para evaluar la marcha del conflicto y nuevas medidas.
Esta profundización de la pelea es expresión de una bronca cada vez más grande por abajo -que se vio también en el contundente paro del 15 de setiembre-, producto de los ataques, los recortes y una situación económica cada vez más dura para los trabajadores.
Una lucha que se extiende en momentos donde estalla de una crisis profunda por corrupción y crimen organizado alrededor del custodia presidencial, Astesiano, golpeando duramente al gobierno y al propio Lacalle Pou, que lo único que decidió hacer después del escándalo fue… irse a descansar a Rocha.
El gobierno, que quería dar impresión de fortaleza tratando de impedir las ocupaciones, lo que intentó primero con los desalojos y la presencia policial intimidatoria, después con la amenaza de prohibirlas y finalmente con una nueva amenaza de someter a los estudiantes a “tareas comunitarias”, está en este momento más débil para frenar el conflicto.
La abnegada lucha que desde abajo han venido dando los estudiantes y docentes no ha retrocedido por las amenazas sino todo lo contrario. Por eso el gobierno seguirá apostando para al desgaste, a la campaña de desprestigio y a que “baje la marea” para poder detener la lucha. ¡No se lo permitamos!
Hay que aprovechar esta relación de fuerzas, de un movimiento de lucha en ascenso y un gobierno en crisis, para derrotar su reforma educativa y su política antiobrera.
Existe entre los liceos, los centros de formación y los gremios educativos diferentes contactos y reuniones naturales, hasta por cercanía geográfica de algunos de ellos, donde se intercambia al respecto de la lucha, lo cual es muy importante.
A raíz de la huelga convocada incluso existen reuniones y contactos de las intergremiales y los diferentes sectores, pero que en general no se convocan con participación masiva y funcionan de manera “consultiva”, no como organismos que decidan de forma unificada.
Por eso es necesario que esa relación de un salto si queremos fortalecer la lucha y aprovechar este momento de fortaleza, que no será eterno. La huelga debe ser aprovechada para llevar el conflicto a los barrios: que las familias, los obreros, los vecinos, apoyen esta pelea. Y sobre todo debe servir para construir un Comité de Huelga un organismo que exprese la unificación y coordinación toda la lucha, evitando la fragmentación por centro de estudio o sindicato.
Ese papel lo puede jugar la CSEU o la organización que estudiantes y docentes se den. Lo importante es que sean las bases en asambleas masivas y unificadas que decidan cada paso y coordinen un plan de lucha de conjunto para poder derrotar la reforma mercantilista del gobierno, lo que impulsará la lucha de todo el movimiento obrero. Es necesario desde las bases discutir como podemos llevar a cabo esta importante tarea.
En este camino también tendremos la chance de construir una dirección combativa y democrática, electa desde las bases, que quiera llevar a fondo esta pelea contra el gobierno y su política mercantilista y de hambre y no que crea en los falsos diálogos para “bajar la pelota al piso” como quieren la máxima dirigencia del FA y el PIT-CNT.
¡Abajo la reforma educativa del gobierno!
¡Coordinar y unificar el conflicto y las ocupaciones!
¡6+1% ahora! ¡Por un plan económico obrero y popular que parta del No pago de la
deuda externa!
¡Construyamos una dirección combativa y democrática que lleve la lucha a fondo!