Finalmente el presidente electo, Lacalle Pou, anunció oficialmente el gabinete que asumirá el gobierno. Ahora los futuros jerarcas se encuentran manteniendo cordiales reuniones de transición con los ministros del gobierno saliente, donde se preparan para asumir las diferentes carteras que dirigirán a partir del primero de marzo del año próximo.
Escrito por Federico
Los integrantes y el perfil del gabinete
El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), estará encabezado por Azucena Arbeleche. Arbeleche realizó su magister de macroeconomía en la Universidad Católica de Chile (la “sede” de la liberal Universidad de Chicago en ese país). Trabajó entre el 2001 y 2003 en el MEF reestructurando la deuda uruguaya luego de la crisis de 2002. En 2005 integró el gobierno frenteamplista, siendo designada por Danilo Astori como subdirectora de la Unidad de Gestión de Deuda hasta que renunció en 2014 para luego pasar a integrar el equipo de Lacalle Pou. Su figura es elogiada tanto por los políticos burgueses como por los analistas económicos privados, debido a su experiencia política y el manejo de la “sostenibilidad” de la deuda, cumpliendo con el pago de la misma y demostrando su sometimiento al capital financiero internacional.
El Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca (MGAP) fue entregado al Partido Colorado, y estará al frente Carlos María Uriarte, de raíces blancas, pero que asume el cargo por su participación en la agrupación “Ciudadanos” de Ernesto Talvi. Fiel representante de los intereses del agronegocio, Uriarte es actualmente productor agropecuario, agrícola y ganadero. Fue director por parte de la Asociación Rural en el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria y es el actual vicepresidente de la Federación Rural.
La burguesía del agro uruguayo tomó muy bien su designación en el puesto ya que se trata de uno de sus hombres al frente del Ministerio. Uriarte destacó el trabajo del exministro del FA en la cartera, Tabaré Aguerre, por su condición de productor arrocero y ganadero, quien renunció al cargo por considerar que no podía solucionar los reclamos de las patronales agrarias y fue sustituido por Enzo Benech en 2018. En ese momentos se profundizaban los choques entre la burguesía del campo y el gobierno del FA. Ese descontento se vio reflejado en la conformación del movimiento liderado por las patronales del campo, “Un solo Uruguay”, del cual el futuro ministro, ha participado. Uriarte ve la necesidad de incorporar de forma más estrecha, “lo más posible”, a las gremiales rurales en el equipo de trabajo del Ministerio.(1) De allí las expectativas de los sectores patronales del campo en que ahora sí sean atendidos sus reclamos, aunque como ya ha manifestado Uriarte, “la sábana es corta” y son muchos los sectores del agronegocio que reclaman ser beneficiados. (2)
Pablo Da Silveira estará a cargo del Ministerio de Educación y Cultura. Proviene también de la educación privada ocupando cargos en la Universidad Católica al igual que la futura subsecretaria, Ana Ribeiro. Su posgrado lo realizó en la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica) y fue consultor en instituciones ligadas a Naciones Unidas y al Banco Mundial (BM). Da Silveira es fundador de EDUY21, organización que introduce la lógica empresarial en la educación con los planes del BM. Defendió el plan privatizador “PROMEJORA” que el gobierno frenteamplista no pudo terminar de aplicar debido a las luchas docentes, y que significa la intromisión de las empresas en la educación pública. Da Silveira ha declarado que es necesario terminar con el “monopolio” de ANEP y crear “redes alternativas” de enseñanza de índole privada.(3) Es una visión mercantilizadora de la enseñanza que atacará a la educación pública buscando su desmantelamiento en beneficio de la educación privada.
Ernesto Talvi, quien quedó a cargo del Ministerio de Relaciones Exteriores, proviene de la Universidad de Chicago y dirigió durante años el denominado “Think thank” (un “laboratorio de pensamiento” al servicio de la burguesía) llamado CERES (Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social), que según publica Brecha: “tiene entre sus donatarios al grueso de la clase capitalista con intereses en Uruguay. Según la web oficial son: Vivion, servicio de acompañantes Vida, Alva, Shopping Tres Cruces, Shopping Portones, Improfit, Zonamérica, Young&Rubicam, Urufor, Urudata, Upm, Unilever, Tacuarembó Marfrig Group, Shellman Wealth, Saman, Roemmers, Quanam, PricewaterhouseCoopers, Posadas, Posadas & Vecino, Pamer, Oca, Movistar, Shopping Montevideo, Montevideo Refrescos, Montes del Plata, Hsbc, Guyer&Regules, Gsk, Ferrere, El Trigal, El Observador, Devoto, Dedicado, Conatel, Compañía Cibeles, la Bolsa Electrónica de Valores, Banque Heritage, Itaú, Baker Tilly Uruguay, Axion, Asociación Española, Aluminios del Uruguay y Afap Sura. (…) el liceo Impulso, que incluía en la directiva a Talvi y a Da Silveira, recibió –entre 2014 y 2018– 75 millones de pesos en donaciones, principalmente de grandes empresas y empresarios.” (4)
El Ministerio del Interior estará a cargo de Jorge Larrañaga, quien llevó adelante el plebiscito “vivir sin miedo” durante la pasada campaña electoral que pretendía sacar los militares a la calle y habilitar los allanamientos nocturnos, entre otras medidas represivas. La designación de Larrañaga responde a la necesidad que tendrá el próximo gobierno de recrudecer la represión cuando los trabajadores salgamos a luchar. Ya ha trascendido que uno de los elementos de la “Ley de urgente consideración” será el reforzamiento del aparato represivo, con más libertad para los policías para reprimir.
En el Ministerio de Defensa, cuya cúpula viene de ser descabezada a raíz de la crisis que se abrió por el conocimiento de las declaraciones de Gavazzo, quedará al frente del blanco Javier García, quien será secundado por el coronel retirado y exdirector del Servicio de Retiros y Pensiones de las FFAA, Rivera Elgue del partido de ultraderecha Cabildo Abierto (CA), tendrá el cargo Director de Secretaría.
Al frente del Ministerio de Desarrollo estará Pablo Bartol, también proveniente de la educación privada ocupando cargos en la Universidad de Montevideo (vinculada al Opus Dei). Es fundador del centro educativo financiado con fondos públicos pero de gestión privada, “Los Pinos”, en el barrio Casavalle.
Omar Paganini, quien estará al frente del Ministerio de Industria, es asesor energético del sector “Todos” de Lacalle Pou. Paganini es director de la escuela de negocios de la Universidad Católica.
Germán Cardoso del Partido Colorado frente al Ministerio de Turismo, secundado por Remo Monzeglio, empresario hotelero que es director ejecutivo de Palladium Business Hotel, de Cala di Volpe y de su empresa Monzeglio Hotel Marketing. Luis Alberto Heber del Partido Nacional estará al frente del Ministerio de Transporte y Obras Públicas. Cabildo Abierto tendrá a Irene Moreira (exmilitante del Partido Nacional y esposa de Manini Ríos) al frente del Ministerio de Vivienda y a Daniel Salinas como Ministro de Salud Pública.
En el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social estará el líder del Partido Independiente, Pablo Mieres, como rostro “amable” y “socialdemócrata”. A pesar de la baja votación del Partido Indepediente, Lacalle Pou estaba interesado en colocar a Mieres en este puesto por su “buen diálogo” con la burocracia sindical.
Como vemos, el perfil del gabinete del gobierno multicolor es claramente de corte empresarial, con viejos nombres de las históricas dinastías políticas de nuestro país, con técnicos y políticos provenientes del empresariado industrial, del campo, de la educación privada y católica y con presencia de militares retirados.
Un gobierno que viene a atacar a los trabajadores y sectores populares
El primero de marzo asumirá un clásico gobierno burgués de la vieja derecha que viene a mantener y profundizar el pago de la deuda externa al servicio del imperialismo y las grandes patronales. Para ello intentará realizar duros ataques contra los trabajadores y sectores populares, como se lo exige el imperialismo y el FMI. La mercantilización de la educación pública, el ataque a las jubilaciones, la flexibilización laboral y salarial, el aumento de tarifas, los recortes en las empresas públicas, el aumento de la represión y el ataque al derecho de huelga, serán las grandes tareas del gobierno entrante.
La magnitud del ajuste, en nombre del combate el déficit fiscal, le exigirá al gobierno actuar rápido, o al menos esa manifiesta ser su intención. Como ya declaró Da Silveira, el gobierno Multicolor pretende ser un “acelerador a fondo” en aplicar las reformas exigidas. Ya también Lacalle Pou ha hablado de un pretendido “shock” de austeridad. En ese sentido se pronunció también el economista liberal y columnista de Búsqueda, Michel Santo, sobre las tareas del próximo gobierno: “Si Lacalle Pou y la Coalición Multicolor quieren evitar un desenlace similar al que tuvo Mauricio Macri en Argentina deberían pensar en ser fieles a lo que prometieron, y actuar rápido”. (6)
El temor a una crisis política o grandes movilizaciones como las que sufrió Macri desvela a la burguesía uruguaya, que debate en todos sus periódicos cómo llevar a cabo esta tarea en un marco de levantamientos populares a nivel mundial y continental, donde los trabajadores y el pueblo de Chile están a la cabeza de las luchas y le muestran el camino a los trabajadores de Uruguay para derrotar los ataques que se vienen.
Ellos saben que si desde abajo nos movilizamos podemos derrotarlos e impedirles aplicar sus planes. Saben que la desigualdad social que esta sociedad capitalista genera es la que está en la base del malestar social. Es el elemento común de todas las insurrecciones populares actuales y Uruguay no escapa a ella, en medio de un continente en llamas.
Elementos de fragilidad de la Coalición
La capacidad del nuevo gobierno para aplicar el ajuste se verá en la lucha de clases, donde tendrá que enfrentar la resistencia de los trabajadores, que incluso con el intento por parte de la burocracia sindical de contener y aislar los conflictos han venido saliendo a la lucha contra los despidos y los ataques, con un importante triunfo de los obreros de Montevideo Gas que logró la estatización del servicio que mantuvo todos los puestos de trabajo.
Por otra parte, el gobierno electo ya mostró varios elementos de fisuras sin todavía siquiera haber asumido. El primero es la propia negociación del gabinete y el reparto de los cargos entre los diferentes partidos que integran la “Coalición Multicolor”, lo que generó que Lacalle Pou tuviera que posponer su anuncio para el lunes 16 de diciembre cuando tenía previsto que fuese varios días antes.
La división de la burguesía que se expresa en la fragmentación a nivel parlamentario tiene dentro de la “Coalición Multicolor” un componente “incómodo” con Cabildo Abierto, que es uno de los elementos de fragilidad del gobierno. Así lo valoró incluso la calificadora de riesgo Fitch, que como representante del capital financiero internacional mostró sus dudas en relación a la capacidad del gobierno en llevar adelante el ajuste prometido y sobre la cohesión de la propia coalición, sobre todo por el fenómeno CA.
Es que aún sin asumir, Cabildo Abierto comienza a generar algunos dolores de cabeza al gobierno, ya que a los videos virales del propio Manini antes del ballotage, los videos y declaraciones reaccionarias de varios de sus integrantes, las complicaciones por los nombres para el gabinete, ahora se suma el caso del futuro Ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, perteneciente a CA. Salinas está cuestionado debido a una investigación interna cuando fue director de la mutualista CASMU que habría favorecido al laboratorio Roemmers,(5) y por su relación con el psiquiatra Martín Gutiérrez, acusado de torturas durante la dictadura, con quien fue socio en la empresa Electrodiagnóstico Médico.
En nuestro país, donde los hechos de impunidad de los torturadores de la dictadura son motivo de la crisis de este régimen de impunidad surgido en 1984, no es un hecho menor.
Las luchas contra la impunidad y la lucha en defensa de la educación pública pueden tornarse explosivas en este nuevo contexto que se avecina.
Prepararse para enfrentar los ataques
Como desde IST hemos venido afirmando durante todo 2019, los trabajadores debemos prepararnos para enfrentar el ajuste que se viene. Pasada la campaña electoral, los dirigentes frenteamplistas ya han declarado que serán una “oposición responsable” que buscará el diálogo y darle gobernabilidad al próximo gobierno ajustador. También han declarado su intención dialoguista diversos burócratas sindicales como Fernando Pereira. Esta política siniestra de la dirigencia del FA y la burocracia sindical la hemos puesto en evidencia en nuestro análisis posterior a las elecciones. (7)
Los trabajadores y sectores populares no debemos dejarnos engañar. El próximo gobierno viene a profundizar los ataques contra los trabajadores, las mujeres, los pobres y los sectores populares. No podemos negociar nuestros derechos. Solo movilizándonos en las calles, unificando los conflictos y organizando la pelea desde abajo, podremos dar pasos que profundicen esta lucha en contra del plan económico antiobrero del próximo gobierno. Para esta tarea, para discutir la situación que se viene y como enfrentarla, y para construir el partido y la internacional que luche por la revolución socialista, es que te llamamos a venir a IST y la LITCI.
1) https://www.elobservador.com.uy/nota/-comienza-un-tiempo-de-siembra–20191219122555
2) https://www.elobservador.com.uy/nota/uriarte-llega-al-mgap-con-credito-20191213191329
3) https://www.montevideo.com.uy/Noticias/PROMEJORA-es-un-chivo-expiatorio–uc154194
4) https://brecha.com.uy/intelectuales-organicos/
5) https://brecha.com.uy/en-familia-2/
6) Búsqueda 12/12/2019
7) https://www.ist.uy/un-primer-analisis-sobre-las-elecciones-y-el-nuevo-gobierno/