La multinacional británica AB Mauri, dueña de Fleischmann, despidió a sus trabajadores y anunció su retiro del país. Lo mismo está ocurriendo con Colgate Palmolive que bajará la persiana el próximo 31 de marzo. Citrícola Caputto viene desde hace años manteniendo deudas con sus obreros en el pago de quincenas y salarios. Ahora amenaza con cerrar y se presentó a concurso afirmando que viven una “compleja situación económica y financiera”. La cadena de supermercados El Dorado será vendida a Saman y adelantó que habrá despidos en todas sus sucursales como sucedió en la venta de Tienda Inglesa. Los trabajadores de ADEOM realizaron un paro con asamblea por las amenazas de nuevas privatizaciones en la IM en el sector de Limpieza.

Los problemas en la educación pública

Los docentes de todas las ramas de la educación comienzan el año con bajo presupuesto, ya que el gobierno no otorgó el 6+1% del PBI. La menor cantidad de grupos en enseñanza Secundaria está generando clases con muchísimos estudiantes, lo que se transforma en hacinamiento y problemáticas en el dictado de clases. Esta situación se vive también en la UDELAR, donde la sobrepoblación estudiantil en Facultad de Ingeniería llevó a que los alumnos entraran corriendo y empujando en medio del caos, tratando de conseguir una silla para no sentarse en el piso o quedar fuera del aula. La falta de cupos en Psicología se repite todos los años sin que se tome ninguna medida de solución. A ello se suma la falta de materias en todos los turnos, cercenando así el derecho a estudiar, principalmente de quienes tienen que trabajar para sostener la carrera.

En este contexto se suma que la situación de violencia que sufrimos las mujeres va en aumento. Los asesinatos contra nosotras son la muestra más aberrante del machismo que reproduce y es estimulado por el sistema capitalista.

15 años de gobiernos “progresistas”

Esta es la situación que estamos soportando luego de 14 años de gobiernos del Frente Amplio, que ha contado con el apoyo cómplice de toda la derecha: Blancos, Colorados, Novick, etc. Los dirigentes del FA demostraron con los hechos que no resuelven las problemáticas de fondo de trabajadores, estudiantes y jubilados. Y que su gobierno y su política económica están al servicio de los grandes capitalistas, las multinacionales y para cumplir de forma fiel el pago de la deuda a los especuladores financieros.    

¿Qué sucede con el PIT-CNT?

A pesar de todas las penurias que vivimos las trabajadoras y trabajadores, hemos mostrado que estamos dispuestos a salir a la lucha. La enorme marcha del día 8 mostró a la mujer trabajadora, las jubiladas, los estudiantes y mujeres de barrios humildes dispuestas a dar pelea por sus reclamos. En enero y febrero los conflictos han sido numerosos, pero a la vez vemos cómo a pesar de ello la patronal y el gobierno logran avanzar con sus planes de recortes de derechos, baja de salario y despidos.

Esta situación se debe a que la mayoría de los dirigentes de la Central están atados al gobierno y no quieren dar una respuesta unificada en la pelea. Mucho menos quieren tener un plan de lucha decidido en asambleas: todo es resuelto burocráticamente por una cúpula. Y tan alejados están de nuestras necesidades que el pasado 8 de marzo apenas convocaron a un paro parcial por compromiso, luego de las 16 horas. Estos altos dirigentes están atornillados a sus sillones, solo defienden sus cargos, el vivir sin trabajar y sus privilegios. Huyen como la peste si se habla de paro general y de unificar las luchas en una sola e ir profundizando las medidas.

Tomar la tarea en nuestras manos  

Desde los lugares de trabajo debemos exigir al PIT-CNT que rompa la conciliación con el gobierno y las patronales y que convoque de forma urgente a un paro general de 24 horas con asambleas de base para que seamos los trabajadores quienes decidamos cuántas horas parar y cómo continuar la lucha. Pero no podemos quedarnos solamente en la exigencia. Debemos organizarnos en los lugares de trabajo, fábricas, oficinas, centros de estudio y barrios obreros para salir a movilizarnos y enfrentar los ataques que estamos sufriendo desde la patronal y el gobierno. En esas luchas también debemos ir discutiendo cómo echamos a la burocracia que no quiere pelear de nuestras organizaciones, recuperando los sindicatos para los trabajadores.    

 

Desde Izquierda Socialista de los Trabajadores llamamos a la más amplia solidaridad con los que luchan y planteamos la necesidad de coordinación desde abajo para unificar los conflictos en curso. Desde los centros de educación, las fábricas y los organismos estatales debemos designar compañeros que recorran los conflictos, planteando unir los reclamos en una plataforma común para salir juntos en una lucha y movilización unificada. Solo si nos juntamos todos en una sola pelea podremos revertir los ataques de los patrones y el gobierno. Desde IST te invitamos a venir con nosotros para organizarnos políticamente, llevar la solidaridad y ponernos a disposición de las fábricas en conflicto, en las luchas estudiantiles y barriales.