
Un paro nacional de 24 horas con movilización se está llevando adelante en toda la educación pública y privada. La Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria, FENAPES, extendió la medida por 48 horas.
El conflicto en la educación pública que comenzó en agosto con la ocupación de los Centros de Formación Docente, se extendió a Secundaria, la Universidad y tuvo como punto más alto la enorme marcha del 6 de setiembre y el paro general convocado por el PIT CNT el día 15 del mismo mes.
Luego de meses de lucha, con una vanguardia juvenil valiente que ha encabezado las protestas y las ocupaciones, la pregunta que muchos compañeros se hacen, es si será posible hacer retroceder al gobierno de derecha en su violenta política de ataque contra la educación pública.
Recorte de los planes de estudio, menos docentes y privatización

La “transformación educativa” del gobierno de Lacalle, se está traduciendo en la imposición de un cambio curricular regresivo, que lleva a más pérdidas de cargos en la educación y una rebaja de los contenidos de los planes de estudio, que son mercantilizados y colocados al servicio y la necesidad de los empresarios. La situación se agrava más, ante un nuevo recorte en el presupuesto que sin duda profundizará el deterioro edilicio. Todo eso beneficia a los mercaderes de la educación privada, que además ya mencionaron que con la “transformación” deberán ajustar la plantilla laboral y habrá despidos.
Por eso es necesario no dejar pasar y derrotar este plan contra la educación. Y como se coreaba hoy en el Platense y luego en la movilización, para detener ese plan del gobierno, cuya cara visible es Robert Silva, es necesario preparar e ir “todos a la Huelga general”.

La lucha y la dirección del conflicto
El enorme obstáculo que encontramos para hacer realidad esa consigna son la enorme mayoría de máximos dirigentes sindicales, que solo quieren ir a negociar, cambiar algo, para que de fondo no cambie nada.
En el día de ayer, antes del paro, la alta dirigencia de la Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza (CESEU) firmó “el convenio salarial de maestros y trabajadores de Primaria, profesores de Secundaria, docentes y funcionarios de UTU, profesores de formación docente y trabajadores de Secundaria” aceptando migajas y debilitando de esa forma la convocatoria al paro y la lucha. (1)
Mientras las bases nos preparábamos para un paro y la lucha, desde las cúpulas sindicales se firmaban convenios con el gobierno que contienen “cláusulas de paz” y un ajuste miserable de salario.
Las bases debemos conversar sobre la lucha y la dirección
Desde Izquierda Socialista de los Trabajadores hacemos un llamado a las bases para reunirnos y conversar sobre el conflicto en la educación. Convocamos a la joven vanguardia estudiantil, del magisterio y los docentes, con quienes compartimos movilizaciones, paros y ocupaciones, para intercambiar ideas sobre el tipo de dirección que se necesita para poder llevar adelante una huelga general, derrotar la “transformación educativa” y todos los planes siniestros de este gobierno de derecha al servicio de los capitalistas.
