El denominado “caso Astesiano” estalló al conocerse las implicaciones del ex-custodio en una red que falsificaba pasaportes uruguayos a ciudadanos rusos. La revelación salió a la luz nada más y nada menos que en medio de la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania y demostró desde el inicio las conexiones internacionales del caso.

Con el correr de las semanas este hecho fue quedando en segundo plano por otra serie de noticias que han generado un escándalo tras otro, a partir de que fueron conociéndose los chats de whatsapp de uno de los teléfonos de Astesiano. En esas conversaciones surgen todo tipo de corruptelas y aparecen mencionados los nombres de los más altos funcionarios del Estado, el gobierno y menciones al propio presidente Lacalle Pou.

Uruguay se integra, con sus características, al conjunto de países del continente que están atravesando profundas crisis en sus regímenes políticos – Brasil, Argentina, Perú, Chile, Colombia, etc-. En esta coyuntura se está transitando una de las mayores crisis del gobierno y el régimen al menos desde el año 2002 y el gobierno de Batlle. Esta situación marca un antes y un después en la vida política del país. 

La fábula del “Uruguay excepcional”,  “republicano”, “transparente”, con su sacrosanta democracia ejemplo en Latinoamérica y el mundo comienza a derrumbarse. Todo el régimen político está en cuestionamiento y la crisis del mismo se acelera, con consecuencias imprevisibles. La podredumbre de este sistema capitalista y todas sus instituciones cada vez se hace más clara.

El gobierno cada vez más comprometido

Foto – www.impacto989.uy

Al cierre de esa nota todavía continuaba conociéndose más y más información sobre el tema. Dentro de los últimos sucesos está el espionaje a senadores del FA, a raíz de su denuncia por la concesión en el puerto de Montevideo. Este espionaje, según los chats y la prensa, fue encargado a Astesiano por parte una empresa de ex-militares uruguayos -que además tiene contactos y negocios con el Estado-, que favorecían sus vínculos con los mandos policiales y de Inteligencia. El hecho, por otra parte, no puede dejar de conectarse con la multinacional Katoen Natie, que fue la beneficiada con la concesión del puerto por 60 años.

Por otro lado, los 450 kilos de “pescado congelado” como un “regalo” por parte los de Emiratos Árabes que ingresaron sin ningún control (vía “valija diplomática”) a nombre de Astesiano, ha levantado, como no podía ser de otra manera, fuertes sospechas sobre su verdadero contenido.

 

A todo lo anterior se suma el tráfico de influencias para incidir en licitaciones y acomodos en el Estado, la obtención de acceso a información de la policía e Inteligencia para “favores” y servicios a empresarios y empresas que le pagaban por ello a Astesiano, y un sinfín de chanchullo más.

Se conoció también que la fiscalía en primera instancia aceptó como condición, a pedido de presidencia, que no fueran incluidos los chats entre Lacalle Pou con Astesiano en la investigación -los cuales además fueron borrados por Inteligencia cuando se incautó el celular-. Cuando esto se supo, Presidencia emitió un comunicado desmintiendo haber puesto tal condición. 

Sin embargo, el Presidente salió a decir luego que el había manifestado su “preocupación” al fiscal de corte Juan Gómez, de que trascendieran “conversaciones personales”, pero que él no había pedido nada, sino que la solicitud la hizo… ¡el Ministerio del Interior! con Heber a la cabeza.

El mismo Ministerio que está en el ojo de la tormenta y que hizo una “investigación” en menos de dos días (de la cual no dio detalles), para decirnos que no constató ninguna “irregularidad”, aunque en los chats aparezcan los nombres de varios jerarcas del Ministerio. ¡Y sin que a Heber se le cayera de vergüenza su cara de piedra!

Las sospechas, contradicciones e inconsistencias en las declaraciones del presidente y el gobierno ya rompen los ojos y dejan al gobierno cada vez más comprometido. Cuando estalló el escándalo, Lacalle Pou y el gobierno intentaron posar de ingenuos y víctimas de un engaño. Decían desconocer totalmente la situación y se deslindaban de las acciones del ex-custodio, al cual después intentaron pintar como un simple charlatán. 

Pero a medida que se conocen más hechos los argumentos del gobierno se hacen menos consistentes. Las respuestas en tono soberbio y con el “estilo canchero” del presidente no despejan las sospechas sino que las profundizan.  

Astesiano ha resultado ser la punta de un iceberg, la persona que cumplía el rol de nexo de una enorme trama de corrupción que no podía desarrollarse si no es con la complicidad de altos jerarcas en todo el Estado. Gobierno, Justicia, Policía, Ejército, todas las instituciones están bajo sospecha, incluida la propia fiscalía que tiene a cargo la investigación.

Cada vez está más claro que este gobierno antiobrero y al servicio de los ricos miente y oculta los hechos buscando proteger a los suyos, al presidente y a estas instituciones podridas del capitalismo.

El Frente Amplio

La dirigencia del Frente Amplio también está en una situación compleja. Por un lado, pretenden capitalizar esta crisis únicamente con miras electorales, pero la misma es muy profunda y compleja para ser tratada como “un tema más” de campaña electoral.

Su propia base y los trabajadores, cuya bronca contra el gobierno no ha parado de crecer debido a las rebajas salariales, el aumento de precios y las reformas antiobreras, ahora han tenido la gota que colmó el vaso con este escándalo. 

Esa presión proveniente desde abajo la sienten los dirigentes del FA y la expresan endurecido su discurso contra el gobierno, pero saben que ellos no pueden pasarse de la raya. Intentan contener esa bronca que existe por abajo. Por la alta dirigencia del FA, en medio de la crisis que afecta al gobierno, no han convocado ninguna movilización callejera contra un gobierno, que ellos mismos han dicho que “está agotado” y que gobierna para los ricos.

Grandes sectores de las bases honestas frenteamplistas han venido luchando en sus barrios, los lugares de trabajo y estudio y están dispuestas -lo han demostrado más de una vez-, a ir a la calle a movilizarse contra un gobierno que cada día odian más. La dirección del FA ¿quiere evitar que su base y los trabajadores se movilicen masivamente y puedan llegar a exigir la renuncia de Lacalle y el gobierno? 

Fernando Pereira ha dejado en claro que: “Nadie en el Frente Amplio está pensando en destituir al presidente” (1), ¿No es esta una forma de proteger al propio gobierno, más allá que lo critique en el discurso?

Las principales figuras del FA se han encargado de dejar en claro una y otra vez que es “la institucionalidad” es lo que está en juego y eso es lo que hay que cuidar.  En este punto coinciden plenamente con el gobierno. Es el punto medular que une a toda la burguesía: cuidar este podrido régimen capitalista. 

Foto: Pablo Vignali / adhocFOTOS /https://www.m24.com.uy

Por eso la dirigencia del FA no quiere tirar mucho de la piola porque no saben hasta donde pueden llegar las consecuencias; hay que recordar que ellos mismos gobernaron este sistema capitalista con sus instituciones podridas durante 15 años, donde no terminaron con la impunidad de los milicos de la dictadura, no eliminaron las AFAPs, se enfrentaron con los estudiantes, docentes y trabajadores de la Educación Pública, etc. 

¿Cómo se pueden hacer los sorprendidos ahora? Estos dirigentes, que, repetimos, gobernaron durante 15 años ¿no conocían desde antes el legajo o ninguna información sospechosa de Astesiano, de los mandos policiales ahora involucrados o de los jerarcas y funcionarios “de confianza” que hace décadas pululan en los cargos y deambulan como perico por su casa en los pasillos de los Ministerios gobierno tras gobierno? 

Por otro lado, ¿no fue bajo los gobiernos del FA que se dieron las corruptelas de Pluna, el escándalo por los contenidos de los “Tribunales de Honor” militares, la extranjerización de la tierra a manos de multinacionales como a la que ahora se le entregó el puerto, etc? 

¿Eso era la “democracia ejemplar”?

La dirigencia del FA no puede hacerse la distraída ni la sorprendida. Ellos también le mienten y engañan a los trabajadores para proteger el capitalismo.

La “institucionalidad” capitalista y la impunidad

Ya son varios los periodistas, comunicadores y panelistas de radio y TV que han colocado sobre la mesa la  conexión de estos hechos con la cuestión de que está probado y es reconocido que existió espionaje a sindicatos, organizaciones sociales, partidos y dirigentes políticos desde finalizada la dictadura hasta como mínimo el año 2005, y ahora vemos que continuó. Que los mandos policiales, militares y de Inteligencia tenían y tienen ese tipo de prácticas desde hace décadas. Aunque lo intenten, ningún dirigente político puede hacerse el tonto.

El “caso Astesiano” ha comenzado a dejar en evidencia para todos este régimen de impunidad. La “institucionalidad” actual que tanto pretenden cuidar desde el gobierno y el Frente Amplio no es más que hija de la impunidad que fue sellada a la salida de la dictadura mediante un pacto con los militares y que se expresó en la Ley de Caducidad. 

Los hechos actuales muestran hasta donde está enquistada esa impunidad y sus profundas ramificaciones. Por ello es imposible “ir hasta el hueso” y defender estas instituciones capitalistas totalmente podridas, surgidas de un pacto con los milicos. 

Para muestra basta un botón. El primer procesado relacionado con el tema de los pasaportes truchos fue sometido a… ¡tareas comunitarias! Esa fue la “pena” ante semejante acto de corrupción de características internacionales. Esta es la misma Justicia que ha dejado impune durante décadas a los torturadores de la dictadura, pero que actúa muy rápido para desalojar ocupaciones obreras o estudiantiles y para procesar obreros como los de Friopan. No se puede confiar en esta Justicia capitalista al servicio de los ricos y los poderosos como nos quieren hacer creer los dirigentes del gobierno y también del FA.

Los trabajadores deben barrer la impunidad

Los trabajadores y el pueblo pobre que están sufriendo las reformas antiobreras de la Jubilación y la Educación, las rebajas salariales, el desempleo; las mujeres que son víctimas de la violencia machista, los estudiantes y jóvenes a quienes no se les da presupuesto educativo, ahora son también testigos de la inmensa corrupción que carcome a las instituciones. 

Hay que exigir que toda la investigación e información alrededor del “caso Astesiano” se haga pública. Ningún ocultamiento, beneficio ni privilegio, ni para el presidente ni ninguna otra autoridad.

Los trabajadores nada tienen que defender de estas instituciones capitalistas. Por el contrario, estos hechos deben servir para mostrar que deben desconfiar más que nunca de ellas y que es necesario cambiarlas de raíz, porque son las instituciones corruptas de los patrones, los capitalistas.

Al contrario de los “socialistas” e “izquierdistas” que se han pasado del lado del capitalismo, que no se cansan de rendir pleitesía a la “democracia uruguaya”, nosotros, desde IST seguimos defendiendo las ideas de Marx, Engels, Lenin y Trotsky, que siempre denunciaron clara y abiertamente el papel explotador, opresor y de pillaje de este sistema.

“Todos los socialistas, al explicar el carácter de clase de la civilización burguesa, de la democracia burguesa, del parlamentarismo burgués, han expresado el pensamiento que con la máxima precisión científica formularon Marx y Engels al decir que la república burguesa, aun la más democrática, no es más que una máquina para la opresión de la clase obrera por la burguesía, de la masa de los trabajadores por un puñado de capitalistas.”  (1).

Por eso necesitamos organizarnos desde abajo, unificar todas las luchas y pelear en las calles.

A los conflictos cotidianos por salarios y derechos que se están desarrollando debemos sumarle nuestra propia salida a la crisis del gobierno y el régimen. Una salida obrera y socialista, que mediante una revolución social imponga un gobierno de los trabajadores y las masas oprimidas. Solo así barreremos toda la impunidad, sus instituciones y la miseria que reina en este sistema capitalista.

Izquierda Socialista de los Trabajadores 

Liga Internacional de los Trabajadores

1) Lenin. “Tesis e informe sobre la democracia burguesa y la dictadura del proletariado.” (1919). Disponible en: https://www.marxists.org/espanol/lenin/obras/1910s/internacional/informe.htm

2)https://ladiaria.com.uy/politica/articulo/2022/12/fernando-pereira-nadie-en-el-fa-esta-pensando-en-destituir-al-presidente/

3) https://www.busqueda.com.uy/Secciones/Astesiano-conseguia-traslados-de-policias-compartia-datos-reservados-con-particulares-y-movia-contactos-en-el-Estado-uc54864