Desde IST y nuestra prensa Rebelión, entrevistamos a los compañeros de la Comisión de Estudiantes en Lucha por la Tierra y el Agua (CELTA).

¿Qué es la CELTA y quiénes pueden participar?

CELTA, es la Comisión de Estudiantes en Lucha por la Tierra y el Agua perteneciente a la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU). Si bien surge por la necesidad de que el movimiento estudiantil se cuestione y problematice ciertos aspectos de la realidad, como el modelo de desarrollo, busca mostrarse abierta a toda la sociedad, y personas que se interesen por la problemática.

La comisión surge en el año 2013, tomando como lucha principal, la dada contra Aratirí, muy latente por entonces. A partir de allí, hemos participado en la ANP (Asamblea Nacional Permanente), llevando a cabo, entre otras actividades, las marchas multitudinarias semestrales, realizadas en 18 de Julio “En defensa del Agua y la Vida”, cuya edición al momento de este año tuvo como consigna “El Agua no se vende, se defiende”.

Un primordial objetivo es que la FEUU tome posturas frente a algunas temáticas y situaciones, y participe activamente de las movilizaciones llevadas adelante por el movimiento popular, por lo cual es fundamental el apoyo y participación de todos los estudiantes.

¿Consideran que es una pelea que tiene conexión con la lucha de los trabajadores?

Desde nuestra perspectiva, sí. Es decir, la CELTA tiene una perspectiva y una concepción de lo que es la Universidad, o por lo menos, de lo que para nosotros debería ser. La Universidad pública tiene que estar del lado del pueblo, porque existe gracias al pueblo y se debe a éste. Por pueblo nos referimos a los más desfavorecidos de la sociedad, los que siempre han sido más postergados, pero que a la vez son los que han construido este país y siguen construyéndolo. Éstos y éstas son los trabajadores y las trabajadoras de este país. Los del norte, los del sur, los del este y oeste de este pequeño país.

Entonces parte del propósito de la comisión es funcionar como un puente de articulación entre los diferentes trabajadores de las distintas partes del país, que por estar haciendo frente a sus problemáticas diarias, a veces no logran entablar vínculos con otros trabajadores de otras zonas del país, que se ven sumergidos ante sus propias problemáticas. Esto no quiere decir que estos trabajadores y trabajadoras desconozcan lo que está pasando en otras partes del territorio nacional, sino que a veces las fuerzas con las que cuentan son débiles, por ejemplo en el sentido económico, muchas veces con el impedimento de que haya una comunicación más fluida para saber cuáles son las nuevas situaciones que se van sumando y para trasladarse de un punto del país a otro para sumarse físicamente a luchas de los compañeros. Esta es otra dificultad de la clase trabajadora.

Nuestra intención como comisión es estrechar estos vínculos y contribuir junto con otros trabajadores y trabajadoras a que se comprenda que la problemática del trabajador de la construcción en el sur, así como la de un arrocero en el este, así como la de las mujeres que trabajan en los naranjales litoraleños o la de los peludos en el norte del país, en el fondo es consecuencia de lo mismo: de la explotación del hombre (y de la mujer) por el hombre (y la mujer). Si no hay unión de la clase trabajadora en su totalidad, siempre existirá explotación, es decir, explotados y explotadores.

¿Cómo se relacionan con los mismos?

La CELTA viene entablando vínculos con diversos sindicatos y organizaciones sociales para aportar a ese objetivo recién mencionado. No es su única razón de ser, pero sí es una de las más importantes y sabemos que es una tarea muy compleja.

año 2014:

En este año la CELTA comienza a mantener contacto con el Centro de Formación Popular (CFP) ubicado en Bella Unión, Artigas. Esto gracias a la aproximación y al trabajo en conjunto con la gente de extensión universitaria.

El CFP se formó gracias a la ocupación el 15 de Enero de 2006 de la ex Colonia España (tierra entonces improductiva y abandonada, en propiedad de Silva y Rosas) llevada adelante por los trabajadores de la zona, quienes pretendían formar una chacra-escuela. El objetivo de la misma era lograr la organización y la formación de los trabajadores y trabajadoras de la zona en diferentes temas que les afectaban y afectan. Además, trabajar estas tierras por y para los trabajadores de la zona, demostrando que la diversificación productiva no era una utopía, sino que es un camino fundamental para la emancipación del trabajador de la caña de azúcar.

En ese año, la CELTA se traslada a Bella Unión con el objetivo de conocer más de cerca esta experiencia y de sumarse a la lucha de estos trabajadores, conociendo más de cerca sus problemáticas. Además, la comisión se suma al 5º Campamento de Formación y Trabajo del CFP, y ahí conocemos, además de integrantes del sindicato de UTAA (Unión de Trabajadores de Azúcar de Artigas), integrantes de otros sindicatos, como son el de IVI- OSDOR (sindicato de la naranja, de Paysandú), entre otros, logrando entablar nuevos contactos.

año 2015:

La CELTA participa activamente en:

– Campamento del 27 de febrero en el Palacio Legislativo por las problemáticas de Green Frozen (ex Calagua)

– Formación de la Coordinadora de Apoyo en Solidaridad a los sindicatos de Bella Unión. Pintadas, repartidas de volantes, los cuales contaban cuál era la complicada situación que se estaba viviendo y en gran modo persiste. Se acompañó a los trabajadores y trabajadoras de Green Frozen al MGAP, MTSS y MIEM.

– El 30 de Abril participamos en el día del trabajador rural, que se conmemora en esta oportunidad, en el Departamento de Salto, en donde también el propósito es aproximarnos más a la lucha de estos trabajadores.

– Contacto con trabajadores de Urupanel.

– Recolección de alimentos en apoyo a los sindicatos de Green Frozen y Urupanel.

A partir del segundo semestre del presente año, empezamos a trabajar activamente en Bella Unión, en coordinación con la gente de extensión universitaria, más precisamente con el CFP de Bella Unión.

¿Vinculan esta lucha también con las demandas estudiantiles como el 6% o contra la mercantilización de la enseñanza?

Cuando hablamos de Universidad popular, implícitamente estamos refiriéndonos a muchas cosas, entre ellas a que la universidad deje de ser privilegio de unos pocos. También, como ya lo señalábamos más arriba, a que la universidad esté al servicio de las clases más oprimidas, al contrario de lo que ocurre hoy en día. Para esto es necesario contar con un presupuesto digno, que permita fortalecer a la universidad para que más personas puedan ingresar y puedan continuar sus estudios. Además, es necesario preguntarse (preguntarnos)  a dónde va el presupuesto que se destina a la UdelaR. Es necesario lograr que éste no sólo se destine en su enorme mayoría a la enseñanza y a la investigación (hoy consideradas por las autoridades de la Universidad como los únicos dos pilares de la Universidad), sino que también se destine presupuesto a la extensión universitaria, para lograr una mejor extensión.

Y en cuanto a la mercantilización de la enseñanza e investigación, a partir de nuestro móvil problematizador del modelo de desarrollo, resulta fundamental la demanda estudiantil (y de otros agentes universitarios) de más y mejor presupuesto, para no ver perpetuada e “inercialmente” reforzada la posición del país como mero exportador de materias primas que la división internacional del trabajo nos asigna, subordinándonos a la dependencia de designios generalmente foráneos, de intereses mercantiles de educación como capacitación de mano de obra que necesiten actores impropios a proyectos soberanos de país.

¿Cómo ven a los estudiantes, y cómo intentan llegar a ellos para sumarlos a esta pelea?

Creemos que este tipo de lucha, que cuestionan un modelo productivo, que se tilda de desarrollo, debe de llevarse adelante por la mayor cantidad de actores sociales posibles, organizaciones, colectivos, en lo posible en coordinación entre sí. Por esto, valoramos la iniciativa de la ANP como ámbito de coordinación de diversos colectivos que nos proponemos articular, en ciertas dimensiones, para frenar un modelo que perpetúa la dependencia de nuestro país y nos ubica en nuestro (y de América Latina y otras regiones) histórico rol periférico en la economía mundial desde la colonización. Donde la clase trabajadora es más explotada y perjudicada. Por poner un ejemplo concreto de actualidad nacional, cuando el agua se contamina en la voracidad de lucro capitalista, y asoman o se refuerzan “soluciones” mercantilizadoras y privativas del vital elemento.

En este sentido, creemos que los estudiantes debemos unir nuestras fuerzas, organizarnos, y participar de la lucha que se da en todo el movimiento popular, para frenar estos megaproyectos y a la saqueadora lógica extractivista en general.

Los métodos que hemos utilizado para llegar a los estudiantes, que por lo general no frecuentan la FEUU, o los espacios gremiales, han sido charlas en diversas facultades, sobre temáticas que la comisión trabaja, con dinámicas de talleres y espacios de discusión, con el fin de concientizar y sumar gente a esta lucha. También hemos realizado distintas volanteadas, convocando a actividades o contando la finalidad de la comisión.

Las redes sociales han sido una herramienta importante, en lo que hace a la difusión de los temas que trabajamos, y convocatoria para la participar de las diversas actividades.

¿Algo más que quieran decir?

Agradecerles por el espacio brindado.