Estamos a pocos días de un nuevo 14 de agosto, fecha histórica de la lucha estudiantil. Ese día se realiza la famosa Marcha de los Mártires Estudiantiles, pero es necesario conocer porqué es justamente ese día, y saber que tiene mucho que ver con lo que está pasando hoy. La fecha recuerda la muerte de Liber Arce, el primer mártir estudiantil, baleado en las inmediaciones de la Facultad de Veterinaria en 1968. Luego de él, varios más cayeron en la lucha por derechos para los estudiantes.
Por Katia
Líber Arce fue el primer mártir estudiantil, pero, ¿qué sucede con aquellos que simplemente desaparecieron? Uno de los casos más claros es el de Héctor Castagnetto, un joven estudiante que desapareció en 1971. Tiempo después Nelson Bardesio reveló que lo habían asesinado y arrojado su cuerpo al mar. En 1972 Ibero Gutiérrez corrió la misma suerte, solo que su cuerpo sin vida fue dejado bajo un árbol como símbolo de lo que se estaba haciendo. Recordemos que todo esto ocurrió previo a la dictadura, y que estos jóvenes eran asociados a movimientos de izquierda.
Las reivindicaciones de hoy y de ayer
Cuando Liber Arce murió, la movilización tenía que ver con el establecimiento de las Medidas Prontas de Seguridad, y el allanamiento de varios centros de estudio. Casi un mes después mueren Susana Pintos y Hugo de los Santos, también baleados mientras junto con otros estudiantes hacían ver su repudio a la represión.
Para entender este proceso, es importante saber que las Medidas Prontas de Seguridad son poderes de emergencia que habilitan al Poder Ejecutivo a suspender ciertas garantías constitucionales. El gobierno de Jorge Pacheco Areco las utilizó, y fue en este marco que la autonomía de la Universidad fue violada, hecho repudiado por los universitarios.
Los estudiantes han tenido siempre un gran peso en las manifestaciones y durante épocas de revueltas. Hoy también son importantes en lo que se refiere a las reivindicaciones, y tenemos una consigna clara: 6% para la educación.
Sin ir más lejos, en el 2013 se registraron hechos de represión contra los asistentes a la marcha y algunos fotógrafos que registraban el evento. Sin dudas los jóvenes estamos bajo la mira, y si bien no morimos en las calles, todavía no somos escuchados en nuestras consignas, somos estigmatizados y reprimidos (a veces de forma violenta).
Por un 6% del PBI para la educación pública
Todos los estudiantes que hoy son considerados mártires estudiantiles, que murieron intentando cambiar lo que les parecía mal, son la confirmación de que los estudiantes estuvimos y que debemos seguir estando presentes, saliendo a las calles para manifestarnos.
Este año la consigna es por 6% del PBI para la educación ahora, necesario y posible, si queremos una educación pública digna. Como siempre, nos uniremos a los cientos de compañeros que quieren lo mismo y marcharemos levantando el reclamo de un mayor presupuesto para la educación. Llamamos también a que los trabajadores se unan, haciendo honor a la estrecha relación entre obreros y estudiantes.