El pasado 27 de abril, día en que se entregaron más de 430mil firmas para habilitar el plebiscito y en vísperas de un nuevo 1º de Mayo, desde el Frente de Trabajadores en Lucha, el Partido de los Trabajadores e Izquierda Socialista de los Trabajadores, realizamos una charla-debate acerca de lo desafíos de la clase trabajadora de cara a un nuevo Día Internacional de los Trabajadores.

La misma fue el paso previo para concurrir de manera conjunta, como una columna clasista, al acto central del PIT-CNT.

A continuación les ofrecemos a los lectores algunos extractos de las intervenciones de las diferentes organizaciones.

Federico, Izquierda Socialista de los Trabajadores-LITCI

“El primero de mayo es una fecha que sintetiza la lucha obrera internacional por el fin de la explotación, por el Socialismo y la destrucción del capitalismo. Ese capitalismo que en los 90’ nos hablaba de su triunfo definitivo, del fin de la historia, del fin de la lucha de clases. Hoy se ve más claro que nunca que eso era una gran mentira. El capitalismo está cada día está más podrido y decadente. Así se ve claramente cuando sus propias cifras reconocen que el 1% más rico de la humanidad acapara más de la mitad de la riqueza mundial. Así se ve con la miseria, la explotación, la crisis y el genocidio, para que un puñado de potencias y multimillonarios sean cada vez más y más ricos.

Pero las masas se están levantando en el mundo entero frente a esta realidad

El estado genocida de Israel no ha podido liquidar la resistencia palestina, que a pesar del genocidio se enfrenta en una lucha a encarnizada contra el sionismo. Una resistencia palestina que se alimenta del poderoso proceso de apoyo mundial por parte de millones de activistas, con protestas que han llegado con fuerza hasta en los mismísimos Estados Unidos.

En Ucrania, importantes sectores de la clase obrera se encuentran armados y en las trincheras resistiendo la criminal invasión rusa, a pesar de la dirección burguesa y pro-imperialista de Zelensky. En Argentina, acabamos de asistir a una fenomenal movilización de masas contra el hambreador y privatizador de Milei.

En definitiva, está colocado al rojo vivo a nivel mundial el enfrentamiento entre estados imperialistas opresores y estados oprimidos. Entre las clases explotadas y las clases explotadoras, es decir: una guerra de clases donde se enfrentan a muerte la revolución y la contrarrevolución.

Nuestro país no es ajeno a esta realidad del capitalismo mundial. Acá aumenta la pobreza, la miseria, los femicidios. El gobierno corrupto y mafioso de Lacalle Pou se ha encargado de proteger pedófilos, beneficiar narcos y estar en todas las jodas habidas y por haber. Ha quedado claro que la democracia capitalista uruguaya de la que tanto se jactan no es más que una puesta en escena para encubrir la impunidad, la corrupción, el beneficio a las multinacionales como UPM y a los fondos especulativos del capital financiero como las AFAP.

Los dirigentes del Frente Amplio no quisieron mover un dedo contra el gobierno y por eso lo sostuvieron cuando estaba cuestionado por beneficiar a un narcotraficante.

El mismo papel cumplieron los máximos dirigentes sindicales del PIT-CNT: evitaron cuestionar al gobierno, aceptaron las rebajas salariales y mantuvieron aislados los conflictos. Esta burocracia sindical podrida no quiere luchar y solo cuidan sus cargos eternos y sus privilegios. Son la correa de transmisión de la burguesía y los capitalistas dentro del movimiento obrero.

Por eso es fundamental organizarnos en los sindicatos para barrer estas direcciones traidoras, que en el fondo también defienden el capitalismo.

Foto IST

Como vemos, compañeros, de cara a un nuevo primero de mayo, los desafíos son enormes. Luchamos contra el capitalismo imperialista en decadencia y contra los dirigentes conciliadores que disfrazándose de amigos de los trabajadores solo buscan un imposible capitalismo con rostro humano.

En esta guerra de clases que se desarrolla hay que dar una lucha de fondo por el Socialismo, por la expropiación de la burguesía. Por el gobierno de los trabajadores a través de sus propias organizaciones. Sabiendo que la revolución en un país solo es el comienzo para el objetivo de la revolución mundial.

Esta concepción de la lucha revolucionaria es la que a nuestro criterio tenemos que rememorar y reivindicar este primero de mayo.”

Rafael Fernández – Partido de los Trabajadores

“Tenemos que apreciar bien este paso adelante que se ha dado [con la conquista del plebiscito], este triunfo parcial porque en primer lugar reivindica a los militantes de base que superaron a sus direcciones y en segunda lugar instala un debate nacional en el cual hay una divisoria de aguas que es de clase (…). Mujica, Orsi, Bergara, ellos se llaman de izquierda, pero están con las AFAP, están en contra de este plebiscito (…). Entonces en este punto hay que afirmar esta división que es entre las clases y no entre tal o cual candidatura o entre tal o cual partido. Esto rompe con el esquema de que los trabajadores debemos aliarnos a fracciones de la clase capitalista para formar un frente de colaboración de clases, un Frente Amplio”.

Gustavo López – Frente de Trabajadores en Lucha

“¿A qué desafíos se enfrente la clase obrera? En primer lugar a volver a levantar y poner en escena un proyecto histórico y social de los trabajadores, que para nosotros siguen siendo la revolución y el Socialismo (…). No hay alternativa posible en el marco del capitalismo. Lo hemos repetido mil veces, el capitalismo solo ofrece la reproducción ampliada y sistemática de la desigualdad, la muerte, la guerra, la miseria (…). Entonces ¿Qué tipo de organizaciones necesita la clase obrera? ¿Son este tipo de representación sindical la que puede llevar a la clase trabajadora al camino de la emancipación? No. No solo no pueden, sino que son, como aquí se señaló, agentes de la burguesía en el movimiento obrero, cada vez más integrado y cada vez más sostén es la burocracia sindical (…). Necesitamos organizaciones que recuperen la democracia obrera y que combatan la burocracia sindical”.