Este año el 8M nos encuentra en medio de una pandemia que dejó más en claro que nunca que a las mujeres trabajadoras todavía nos faltan derechos. El pasaje al teletrabajo hizo que estuviéramos en nuestras casas haciéndonos cargo de los cuidados de los hijos y adultos mayores, las tareas domésticas y el trabajo remunerado, todo al mismo tiempo.
Escrito por Katia.
Aquellas que tuvieron que seguir saliendo para trabajar lo hicieron bajo el enorme riesgo de contraer el covid, siendo las enfermeras, cajeras de supermercado y personal de cuidados en su mayoría mujeres. Muchas empresas ni siquiera cuentan con la seguridad mínima como alcohol en gel o distancia social.
Y ahora que todo reabre, son en su mayoría maestras y profesoras las que deben llevar adelante las tareas con los problemas anteriores como la falta de locales adecuados y recortes de presupuesto, sumado a la actual pandemia.
Cada vez más feminicidios y menos justicia
Dentro de toda esta situación de pandemia, a las mujeres nos siguen matando y seguimos siendo víctimas de redes de explotación sexual. El año solo lleva tres meses de comenzado y ya tenemos 6 mujeres asesinadas por violencia machista. Ni siquiera dentro de nuestros hogares podemos estar tranquilas.
También a comienzo de año se conoció la existencia de una red de explotación sexual en Treinta y Tres. A pesar de que muchos niños, niñas y adolescentes corren riesgo, no hay garantías para su seguridad. A su vez, la Operación Océano llevó a conocer a varios hombres de altas esferas que participaban de la explotación sexual a menores, pero todos siguen sueltos y sin condena.
Por todo esto las mujeres estamos siendo vanguardia en la lucha, combatiendo el machismo en todos los ámbitos y hablando en nuestros trabajos, dentro de la familia y en los lugares de estudio. A pesar de que la discusión se diluyó lo más posible dentro del Pit-cnt, donde la burocracia sindical decidió no parar sin consultar a las bases, las mujeres se organizaron.
Frente al peligro que vivimos las mujeres diariamente y la falta de derechos, sabemos que el problema de fondo es un sistema que hace uso de las desigualdades para su beneficio. Por eso este 8 de Marzo es un día para recordar todas las luchas y seguir reivindicando nuestros pedidos: presupuesto para la Ley contra la violencia machista, atención integral y protección a mujeres víctimas de violencia, trabajos dignos y con igual remuneración. Las mujeres tenemos que estar en las calles, luchando para que el socialismo por fin nos libere.